El medio ambiente natural tiene numerosas amenazas de animales depredadores. Por la superviviencia, algunos animales cuentan con características como color y forma que utilizan para mimetizarse con el entorno y no ser reconocidos por otros animales. Los animales camuflados con el entorno lo hacen para pasar desapercibidos o para acercarse sigilosamente a sus presas.
¿Qué son los animales camuflados?
Un animal camuflado o de camuflaje es aquel que se ha adaptado a su entorno para confundirse con éste y ser difícil de individualizar. Hay animales que tienen forma de hoja y son color marrón y pueden ser confundidos con una hoja. Otros animales camuflados tienen un color verde característico de las plantas de la zona donde viven o su forma, tamaño y color es muy similar a la corteza de los árboles.
El camuflaje de los animales varía de una especie a otra. Si una especie tiene plumas o escamas, puede cambiar de pluma y camuflarse con mucha más regularidad y facilidad que un animal con pelaje. Esta es la razón por la cual la mayoría de los animales con pelaje se camuflan por temporada.
Hay cuatro tipos principales de camuflaje:
- Coloración oculta: esto es cuando un animal se disfraza contra su fondo siendo del mismo color que él.
- Coloración disruptiva: esto es cuando las rayas, manchas u otros patrones dificultan que otros animales distingan el contorno de sus cuerpos.
- Disfraz – Esto es similar a ocultar la coloración; sin embargo, en lugar de usar color, los animales imitarán la textura o la forma de su entorno.
- Mimetismo: estos animales fingen parecerse a otros animales y, a veces, se les llama “impostores”. Esto es común en animales de presa que pretenden ser un animal diferente que es tóxico o venenoso para su depredador.
Ejemplos de animales camuflados
- Insecto palo. Este insecto se ve exactamente como un palo o una rama promedio. Esta criatura se ha adaptado para tener una apariencia de corteza, lo que le permite camuflarse completamente contra los árboles. A veces, incluso se balancean de un lado a otro con el viento como una rama para convencer a los depredadores de que no están allí en absoluto.
- Cebra. Para nosotros, los humanos, las cebras no parecen estar camufladas en absoluto. Sus distintivas rayas blancas y negras se destacan contra la sabana marrón donde viven y hacen que sean fáciles de detectar. Sin embargo, su principal depredador, el león tiene una visión dicromática. Los leones sólo pueden ver colores creados por dos colores básicos: azul y verde. Los demás colores les cuesta trabajo distinguirlos. Las cebras viven en manadas, y sus rayas dificultan que los leones escojan una sola cebra para cazar. Por lo tanto, las rayas de una cebra les ayudan a mezclarse con la manada, en lugar de mezclarse con su entorno.
- Leopardos y guepardos: Son bien conocidos por sus manchas y juegan un papel muy importante en el camuflaje de estas especies. Las manchas ayudan a disimular el contorno del cuerpo del animal, lo que le permite mezclarse con el paisaje de sabana marrón. Con esta táctica de camuflaje, los leopardos y los guepardos pueden acercarse sigilosamente a sus presas y cazar.
- Saltamontes. Algunos saltamontes se mimetizan con su entorno en el color, la forma y peso ya que parecen la hoja de un árbol.
- Búho. Algunos búhos se mimetizan con la corteza del árbol en el que viven.